Las mosquiteras correderas resultan más baratas que las enrollables, pero sólo pueden ser instaladas sobre ventanas también correderas. Los marcos de las mosquiteras son de aluminio y se fabricarán con el mismo acabado que el de la ventana sobre la que irá instalada.
Su instalación es sumamente sencilla y no requiere de ninguna herramienta; simplemente hay que encajar la mosquitera corredera en el perímetro interior del marco de la ventana contra las hojas, empujando primero la mosquitera hacía arriba del marco, centrándola y dejando finalmente «caer» las ruedas inferiores sobre el nervio del marco de la ventana.
Cuando llegue el frío, lo más habitual es quitar y recoger las mosquiteras hasta que vuelvan los meses de calor.